Un espectáculo que recrea el espíritu de los Redondos de los ´80
A lo largo de la década del ´80 Patricio Rey y sus Redonditos de Ricota, la banda que hizo culto del misterio y revolucionó la historia del rock nacional, era un colectivo musical rodeado de bailarinas, actores, monologuistas y números circenses. Actuaban en bares, teatros y clubes y cada concierto era un caos meticulosamente organizado. Muchas de las canciones que tocaban en esos conciertos quedaron fuera de la discografía y pasaron a ser perlas preciadas.
Recuperando el espíritu de aquel tiempo, Patricio Super Show propone un espectáculo con todos los condimentos que forjaron las bases del mito de Los Redondos.
En mayo de 2019 el show se estrenó en La Trastienda con entradas agotadas y hoy tenemos la posibilidad de volver a invocar esta experiencia contracultural que evoca a la varieté chamánica que Patricio Rey ostentaba en los ´80
En su libro, “Recuerdos que mienten un poco” el Indio Solari nombra a los actores, monologuistas, bailarinas, performens, etc. que eran parte de la troupe ricotera de aquellos tiempos como Los Talentos. Y son precisamente la versión del siglo XXI de ellos los que sostienen el concepto estético de esta producción. Los irreverentes monólogos de Enrique Symns en donde predomina la ácida crítica social desde una mirada marginal, son interpretados por El Orador en Patricio Super Show. El Ballet Ricotero ocupa un rol central con sus cuadros musicalizados con La Obertura 1812 de Tchaikovsky (pieza con la que Los Redondos abrieron la presentación de Oktubre en Palladium). El Sultán distribuye los auténticos redonditos de ricota cocinados por sus propias manos, mientras despliega sus astucias de ilusionista. El Poeta sorprende a los espectadores con textos que abren puertas sensoriales. El Cabaret Circense atraviesa todo el espectáculo con trucos de clavas, fuego y aros. Los pinceles y los colores van transformando manchas sobre un lienzo a lo largo de toda la velada, hasta dar con las imágenes que fueron indispensables en la obra de Los Redondos.
Algún desprevenido confundirá este espectáculo, con el show de una banda homenaje, pero debemos decir, que no hay nada más alejado a la realidad.
Si, es cierto, que hay también una banda en vivo que interpreta minuciosamente el repertorio que Los Redondos hacían en esa década, poniendo el foco en canciones de los discos Gulp y Oktubre, pero el protagonismo musical está en temas que nunca llegaron a grabarse como “Mi Genio Amor”, “El Hombre Eléctrico”, “De Esos Polvos Futuros Lodos” entre muchos otros. Esto ocurre como si cada musico fuera un activista de la rebelión que propone la escenografía basada en la obra de Rocambole.
Patricio Super Show no es un espectáculo para ser contado, es una experiencia para ser vivida.