La obra de Felisa Gradowczyk es a la vez concreta e inefable. La artista no puede ser categorizada en un sentido convencional. Percibimos en su arte la flexibilidad de su imaginación, su apertura y su inquietud por examinar y sumergirse en la profundidad emocional de experiencias pertenecientes al pasado, al presente y al futuro. A pesar de que está intensamente consciente de los gustos y de las modas artísticas en el mundo entero, Felisa sin embargo sigue siendo profundamente introspectiva y lo que es más, deseosa de evocar los valores (tanto éticos como táctiles) que reflejan su meditación sobre el magma de la vida cotidiana y la lucha por la subsistencia en el teatro del mundo.
En el aspecto físico, sus obras de arte tienen amplia variación. Ha creado numerosas series de esculturas, instalaciones, foto-montajes y dibujos. La presente muestra intenta sugerir algo del sabor esencial de la variedad de formas experimentales que ha usado a lo largo de su carrera, que sigue evolucionando de una manera dinámica y siempre abierta a nuevos temas y posibilidades estéticas.
Debemos comprender el arte de Felisa Gradowczyk como parte de una corriente continua, como un arroyo que corre en muy variadas direcciones pero que siempre acarrea en sí la insinuación de un anhelo de trascendencia teñido de esperanza.
Artistas: Felisa Gradowczyk // Curador: Edward Sullivan //