Como unos dibujos sin fronteras. Apuntes de otros. Ataque de la máquina automática de dibujar. Un apunte detrás de otro, no hay necesariamente nada que decir. Sin la frontera, sin las fronteras. A un paso del arte, como un paso. A cada momento, frente al dibujo. Como estar frente al dibujo siempre, sin fronteras. Con persistencia, una intuición de la persistencia. Dibujar a cada momento pero apenas en algunos rincones del día. Un ejercicio de la intensidad desplazado por la evolución del día hasta el punto que nada puede desplazar. Como unos dibujos sin esa frontera, lejos de ese límite. Vivir un día para hacer un punto, x, sin nada que decir. En el detalle de una frontera nueva abierta. Unos dibujos geométricos sentimentales. Sin otro instrumento que la artesanía de los sentimientos. Los instrumentos del sentimiento, en medio de la tormenta. La tormenta es muy buena. Como piedras que nadie se va a llevar delante de nuestros ojos. Como unos dibujos sin fronteras, hechos en un pulso residual, como si la historia no hubiese sucedido en ningún lado. Como más allá de toda frontera en donde el corazón, los sentimientos dibujan. Y lo que mejor dibuja en esa tierra sin fronteras, y lo que mejor dibuja desde el corazón. Como dibujar a escondidas
Artistas: Emiliano Bustos //