Es cierto que todavía hay payadores, pero el verdadero “último” fue José Betinotti, un hombre que estableció un puente entre las maneras de la música popular del siglo XIX y las del siglo XX. Esta película –que tuvo más de una versión, hasta la definitiva de 1950– toma uno de los grandes temas del melodrama: la tensión entre el arte y la vida cotidiana. Hugo del Carril interpreta al cantante y payador, y gran parte de la historia gira alrededor de su canción “Pobre mi madre querida”, clásico del repertorio argentino que Carlos Gardel grabó en 1912. De hecho, la aparición fantástica de la efigie de Gardel hacia el final de la cinta marca de modo poético el fin del arte –y de la vida, lo mismo en este caso– de Betinotti. El trabajo de Del Carril es poderoso, y pocas veces cantó mejor en la pantalla grande.

Argentina, 1950, 90'.

Última fecha

sáb

15

septiembre / 2018

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